Cuando una productora pone en marcha una producción, sea grande o pequeña, se enfrenta a millones de intereses creados por las marcas que patrocinan dicho evento. Las condiciones a las que suelen enfrentarse son amplísimas y muy variadas, por ejemplo Apple tiene una impuesta: los malos de las películas no pueden usar, bajo ningún concepto, un producto de ellos.
Apple es consciente de la importancia que la aparición de los smartphones puede tener ante una obra audiovisual que va a llegar a millones de personas y habría tratado de poner restricciones en el ámbito del “product placement”. El “product placement” es un formato publicitario que incluye la aparición de marcas o productos en películas, series, etc., las cuales se pueden mostrar claramente o bien de una manera más velada, casi de forma subliminal.
La empresa de la manzana no estaría por la labor de que los «tipos malos», del mundo del celuloide, lleven un iPhone y puedan manchar la imagen de sus smartphones o asociarla a valores negativos. Esto lo reveló el director de «Puñales por la espalda» y «Star Wars: Los últimos Jedi», Rian Johnson, en una entrevista a la revista Vanity Fair.
Los villanos de las películas no usan iPhone:
La verdad es que si yo fuera una compañía cómo Apple, tampoco dejaría que “los malos” de una película o serie, usasen mi producto. Lo haría parecer malo y deshonesto, y eso no sería una buena estrategia de marketing de ninguna compañía.
Lo malo es que al tener esta postura, es que cuando estemos viendo una película en la que haya otro tipo de teléfono, ya sabemos cual es el malo de la cinta. Aunque supongo que eso también lo habrán pensado los directores y no pondrán dos tipos de teléfonos distintos, por no destriparnos el film o la serie.
¿Tú qué piensas del tema?. ¿Es interesante, no crees?.
Buenas noches
Buen artículo. Interesante
No tenía ni idea, gracias